El Censo Nacional de Población y Viviendas es la herramienta que visibiliza el estado de los Derechos Humanos en el país

Por: Admin | Publicado en fecha: 10-12-2021

Los derechos humanos son el conjunto de normas que regulan el respeto a la dignidad y en sí, a la existencia humana en su totalidad. El Día de los Derechos Humanos se celebra cada 10 de diciembre, día en que, en 1948, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH).

El Censo Nacional de Población y Viviendas, cuya financiación se encuentra hoy pendiente de aprobación en la Cámara de Diputados, arriesgando de esta manera su realización para el año 2022, es la herramienta por excelencia que cuenta el país para visibilizar cómo se encuentran los derechos humanos en materia de identidad, familia, propiedad, educación, salud, seguridad social, trabajo, y otros puntos.

El Censo se constituye en los cimientos de cualquier sistema democrático, porque nos permite conocer cómo están las garantías constitucionales sobre la calidad de vida y el bienestar de los compatriotas; por ello, es primordial que este operativo pueda realizarse en tiempo y forma.

El Instituto Nacional de Estadística (INE), a través de la Encuesta Permanente de Hogares Continua 2021 (EPHC), también se encuentra recolectando información acerca de las actitudes de la población sobre los derechos humanos en Paraguay.

Los derechos humanos se caracterizan porque son universales, ya que aplican a todos los seres humanos; son inalienables, porque un individuo no puede ceder estos derechos en favor de otro; son indivisibles, porque son un cúmulo de derechos –civiles, sociales, culturales, entre otros- y ninguno prevalece sobre otro, sino que todos se encuentran en el mismo nivel para cada ser humano; son interdependientes y a su vez se interrelacionan, lo que quiere decir que aunque cada derecho es individual dentro de un mismo cúmulo de derechos, la aplicación de uno usualmente garantiza la aplicación de otro u otros; son igualitarios y no discriminatorios, ya que se aplican a todos los seres humanos sin distinción alguna; son incluyentes, debido a que todas las personas y pueblos tienen derecho a participar y contribuir en su aplicación; y además, fomentan la rendición de cuentas por parte de los Estados para asegurar su aplicación.